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Fernando Olivera: El rapto.- TEXT FROM THE NOVEL The goldfinch by Donna Tartt (...) One night we were in San Antonio, and I was having a bit of a melt-down, wanting my own room, you know, my dog, my own bed, and Daddy lifted me up on the fairgrounds and told me to look at the moon. When "you feel homesick", he said, just look up. Because the moon is the same wherever you go". So after he died, and I had to go to Aunt Bess -I mean, even now, in the city, when I see a full moon, it's like he's telling me not to look back or feel sad about things, that home is wherever I am. She kissed me on the nose. Or where you are, puppy. The center of my earth is you". The goldfinch Donna Tartt 4441 English edition

Saturday, October 2, 2010

EL ANTI-SINDROME BELEN ESTEBAN. YO POR MI HIJA APRENDO. ¿ME EXPLICO?


“Yo por mi hija .... APRENDO. .... ¿Me explico?"…
o El anti-síndrome Belén Esteban".
 (Con ocasión del escrito de una profesora de historia titulado: El síndrome Belén Esteban, difundido por Internet).

En el artículo venía un vídeo de un programa de Telecinco en el que Belen aparecía de “profesora” y la transcripción de una parte de la grabación de la que reproduzco un "trocito" para que pongan en contexto lo que escribo. No quiero divulgar el vídeo, por respeto a Belén. Un mal día lo tiene cualquiera, incluso ella y los directivos de Telecinco.

Transcripción…: (.....)   "Eh, que yo no quiero ayuda de nadie, que no necesito ayuda, leche" dice la Esteban en un momento de estos cuatro minutos de despropósitos. "Como yo no he pillado esa revolución -la industrial- tres narices me importa"- un argumento que podría haber empleado uno de mis peores alumnos.. (.......), escribe la profesora. 

Belén también dice en el vídeo "algunas inexactitudes históricas" sobre el Neolítico, mientras sus compañeros, encabezados por Jorge Javier, se ríen, “interpreto” que con ella. 
  
Recibo con frecuencia mensajes alusivos a Belén Esteban. No me da tiempo a leer la mayoría, pero observo que la nombran, casi siempre para meterse con ella.

He conocido por los medios de comunicación que, en el hipotético caso de que se presentara a las elecciones generales, obtendría cinco diputados --espero que los políticos reflexionen seriamente sobre este dato estremecedor--, de acuerdo con la famosa encuesta de Sigma Dos que ha promovido la empresa en la que trabaja: Telecinco.

Como creo que los medios de comunicación desde su privilegiada posición, incluso las cadenas de televisión privadas, además de informar y entretener deberían al menos “no maleducar”,  sugiero a quienes tengan posibilidades de hacerse oir o leer, que convenzan a los directivos de Telecinco, al Ministro de Educación y a los 17 Consejeros de Educación para que, de acuerdo con ella, se valgan del "tirón de Belén" para mejorarnos la vida a todas las mujeres que la seguimos, entre las que me cuento --a riesgo de sufrir un infarto en algunos momentos como los del citado vídeo y de que nos estremezca ver como, presuntamente interpreto yo, se presta a su manipulación en el peor de los sentidos: ser ridiculizada al mostrarse haciendo continuos alardes de su “pretendida académica ignorancia”--.

Se me ocurre que podrían utilizar su plataforma en Telecinco para promover una sección que se llamara "Aprendiendo con Belén, mejorar es posible", o algo así. Desde allí ella podría contarnos, entre otras cosas, en su lenguaje sencillo, qué fue la revolución industrial, cuándo tuvo lugar el Neolítico, lo que significaron ambos procesos para la humanidad......, y sobre todo, lo importante que es saberlo.

Podría también mostrarnos, por qué no, cómo rellenar una instancia; abrir una cuenta en un banco o pedir un crédito; hacer un currículum y cosas como éstas todas ellas, difíciles de hacer para la mayoría de los ciudadanos, incluso para los "supuestos académicamente instruidos". 

Ella es muy lista y lo aprendería enseguida. Conseguiría lo que no consiguen las autoridades educativas, a las que me acabo de referir, en la escuela: que los hombres (lo utilizo para ambos sexos) de este país recuperemos una mayor dignidad a través del conocimiento, lo único que al final nos salva y nos diferencia. Sería muy didáctico -y honroso para Belén- ver su antes (del video que adjuntaba la profesora de historia que escribía el artículo sobre el Síndrome Belén Esteban que casi me hizo llorar) y su después. 

Estoy convencida de que, bien asesorada y ayudada por amigos, periodistas y profesores, sería una magnífica profesional del periodismo y aún mejor profesora, porque dotes de comunicación e inteligencia natural no le faltan. Seguro que esto sería mucho más eficaz y humano que lo que yo interpreto significa ridiculizarla a diario y ponerla en evidencia: citarla en la prensa como "ejemplo de ascensión social" a imitar por nuestros jóvenes, o denigrarla en directo con provocaciones para que muestre ante las cámaras su cara menos amable. 
  
Lo escribo completamente en serio: Todos aprenderíamos cosas nuevas y recordaríamos otras, útiles también, que hemos olvidado.

Propongo que se sustituyan esos eslóganes de la cadena, a lo que veo ahora vacíos de contenido:

 “Doce meses, doce causas”  por  este otro:
 “Doce meses, una causa: que Belén cambie espontáneamente un "pelín" sus dos gritos de guerra:

Yo por mi hija  .....mato........... ¿Me entiendes? …..

 por estos otros:

YO por mi hija ......... APRENDO,............. ¿Me explico? ....

Como resultado, ella llegaría cada noche a su casa más contenta a abrazar a su hija, porque yo sé que en el fondo de su corazón Belén, es una señora.

 Ahora me tomo la libertad de dirigirme a ti, Belén, aun a sabiendas de que no te llegará y pidiéndote que no interpretes esto como consejos paternalistas o presuntuosos -que detesto- sino como una apreciación, si me apuras, sólo estética:

Belén, apúntate y promueve esta iniciativa. Te lo dice Carmen Martín, desde la simpatía y la ternura que me inspiraste en tu primera aparición en los medios de comunicación; pero aterrada y triste hoy al contemplar como evolucionas. 

Recuerda que la segunda mitad siglo XX se caracterizó por el acceso significativo de la mayoría, pero sobre todo de las mujeres, a la cultura y al mundo profesional en nuestro país. Nuestros padres con su actitud lo hicieron posible. Por favor, colabora para que el siglo XXI no pase a la historia justamente por lo contrario.

Piensa que si te apuntas a esta iniciativa, por añadidura, todos, aliviados, nos sentiríamos un “poco más Belén Esteban”, cuando aparezcas a diario en el salón de nuestra casa; y lo que es más, tu hijita, ya casi también nuestra, se sentiría aún mucho más orgullosa de ti y llegaría a ser mucho más sabia.

Y te digo más, incluso yo -ahora reacia y conmovida por los resultados del sondeo-, te votaría después, orgullosa, en unas elecciones generales si, cosa improbable, las dos lo sabemos, te presentaras. Pero estarás conmigo en que antes tendrías que formarte.

Si no lo haces por ti, hazlo por ella y por nuestros hijos. Hoy por hoy veo complicado que se pongan a estudiar en casa y en la escuela si te ven en un video como el que divulgaron por Internet.

Un beso para las dos, -que según dicen los científicos, inmuniza y alarga la vida- y deja que se cumpla este sueño.

En cualquier caso, nunca olvides que la educación y las buenas maneras hacen más fácil la vida.

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